La osteocondrosis torácica es una enfermedad de la columna vertebral, en la que la posición de las vértebras se vuelve antinatural, el disco intervertebral se degenera, como resultado de lo cual su altura disminuye. La osteocondrosis en la región torácica no es tan común como en el cuello o la espalda baja. Tiene que ver con la anatomía. En la parte central, la columna es estable y duradera, además, es menos susceptible al estrés, menos móvil, hay menos condiciones para traumatismo en los discos vertebrales.
El grupo de riesgo de esta enfermedad incluye a las personas mayores y aquellas que llevan un estilo de vida sedentario. Sin embargo, la patología se diagnostica cada vez más en adolescentes y, a la edad de 30 a 35 años, el número de casos aumenta drásticamente.
Clasificación de la osteocondrosis torácica.
La enfermedad se clasifica sobre la base del principio sindrómico. Las áreas afectadas de la columna afectan negativamente las formaciones nerviosas.
Por localización, se distinguen tales formas de osteocondrosis de la columna torácica:
- síndrome de compresión (el desarrollo está asociado con tensión, deformación o compresión de la raíz nerviosa; áreas de la médula espinal o vasos sanguíneos pueden verse afectadas; como resultado, aparecen síndromes espinales, vasculares o radiculares);
- síndrome reflejo (el efecto se produce de forma refleja, tensionando los músculos inervados; se producen trastornos distróficos y vasculares);
- síndrome mioadaptativo (daño muscular en el segmento torácico debido a una sobrecarga constante).
Etiología de la osteocondrosis de la región torácica.
Las causas de la osteocondrosis torácica son consecuencia de la escasa actividad física, las lesiones de espalda, el esfuerzo físico intenso, los trastornos metabólicos, el sobrepeso, la inmunidad deficiente, los resfriados frecuentes, las infecciones, el tabaquismo, el estrés. En las mujeres, entre otras cosas, el desarrollo de la enfermedad puede desencadenarse al caminar con tacones altos y llevar un hijo.
Además, las causas de la osteocondrosis mamaria son:
- carga mal distribuida en los discos intervertebrales;
- cambios degenerativos en los tejidos del disco intervertebral;
- falta de actividad física mínima;
- escoliosis;
- posición anormal permanente de la columna en una posición sentada.
Patogenia de la enfermedad
Un ligero malestar, tensión muscular y un dolor "tolerable" al inhalar y agacharse son los primeros signos de la osteocondrosis torácica. Una persona generalmente busca a un médico cuando el dolor se vuelve agudo y no le permite llevar una vida normal. La terapia para la osteocondrosis torácica es a largo plazo, lo que requiere atención constante. Si no se tratan, los cambios distróficos conducen a una movilidad limitada e incluso a la discapacidad del paciente.
Manifestaciones clínicas de la osteocondrosis.
Los síntomas de la osteocondrosis mamaria tienen diferentes manifestaciones, según la localización del proceso. Además, la enfermedad se "ajusta" hábilmente a otros problemas.
Los síntomas más típicos de la osteocondrosis torácica:
- dolor en la región interescapular;
- molestias en el pecho;
- dolor de cabeza y angustia;
- dolor al inclinarse;
- restricción de movimiento;
- sensación de hormigueo en el cuello, abdomen, pecho y brazos;
- mareos, tinnitus, parpadeo de moscas ante los ojos;
- sensaciones de dolor que aumentan con la inhalación.
A los síntomas de la osteocondrosis torácica se suman la disminución de la sensibilidad, la función motora deteriorada y la atrofia muscular a medida que avanza la patología.
Características del curso de la osteocondrosis mamaria durante el embarazo.
El desarrollo de dolor durante el embarazo está asociado con el aumento de peso. Al mismo tiempo, el desplazamiento del centro de gravedad cambia la postura. La escasa actividad física en combinación con un estilo de vida sedentario provoca una alteración de la elasticidad de los discos. El aumento de la presión sobre la región torácica provoca dolor. Durante el embarazo, la osteocondrosis de la región torácica se trata principalmente sin el uso de medicamentos especializados, ya que pueden dañar la salud del feto. Por lo tanto, se utilizan aplicadores, masajes y ejercicios especiales de Kuznetsov.
Características de la enfermedad en niños.
La osteocondrosis de la columna torácica puede manifestarse de 8 a 17 años. Una columna no preparada sufre cambios patológicos bajo cargas pesadas. Después de un diagnóstico correcto, se inicia el tratamiento. Como regla general, en este período, un proceso de tratamiento iniciado a tiempo conduce a excelentes resultados. Es necesario fortalecer los músculos, mejorar el estado del cartílago y realizar fisioterapia.
Complicaciones de la patología.
La mayoría de los pacientes con osteocondrosis torácica intentan posponer el tratamiento, lo que, a su vez, conduce a complicaciones importantes.
Consecuencias de la osteocondrosis torácica:
- Formación de una hernia intervertebral.
- Lesión de la médula espinal
- La aparición de hipertensión.
- El riesgo de accidente cerebrovascular y ataque cardíaco.
Diagnóstico
El diagnóstico de osteocondrosis torácica, incluido el diferencial, incluye:
- radiografía digital;
- ECG;
- Ecografía del corazón, riñones y órganos abdominales;
- CONNECTICUT.
El médico determinará la imagen exacta en la radiografía, donde verá el crecimiento del cuerpo vertebral y el desplazamiento de los discos. La osteocondrosis torácica, caracterizada por síntomas similares de otras enfermedades, requiere un diagnóstico diferencial con lesiones espinales, tumores y neoplasias en la columna vertebral, osteoporosis, artritis reumatoide, coxartrosis y una serie de otras afecciones.
Tratamiento de la osteocondrosis de la columna torácica.
El tratamiento de la osteocondrosis torácica implica el uso de una terapia compleja, cuyo propósito es detener y prevenir una mayor destrucción de los discos o restaurar su estructura, mejorar la biomecánica de la columna vertebral y eliminar los trastornos del sistema nervioso central.
Lo primero que debe comenzar con el tratamiento es aliviar el dolor y la inflamación mediante la terapia con medicamentos.
Se recomiendan al paciente medicamentos de los siguientes grupos:
- fármacos anti-inflamatorios no esteroideos;
- glucocorticosteroides;
- diuréticos;
- condroprotectores.
Cuando el dolor cede, pasan a la siguiente etapa del tratamiento de la osteocondrosis torácica. Se prescribe un curso de masaje terapéutico, acupuntura, ejercicios de fisioterapia. Además, la fisioterapia es muy eficaz. Si está indicado, se puede recomendar la terapia manual.
Control curativo
La convalecencia es supervisada por el médico de familia o el especialista que observó al paciente durante el curso de la enfermedad. La ausencia de recaídas durante el año indica la normalización de la función del sistema musculoesquelético.
Profilaxis
La prevención de la osteocondrosis torácica requiere las siguientes reglas:
- control de la postura;
- higiene del trabajo (control de la posición de las manos, presencia de una silla con respaldo alto plano);
- descansos cada 2 horas para ejercicios específicos;
- durmiendo sobre una superficie dura;
- ausencia de actividad física irregular (incluido el transporte de cargas pesadas);
- llevar una mochila en lugar de una bandolera;
- clases regulares de terapia de ejercicio.
consejos y trucos
La osteocondrosis torácica requiere rehabilitación a largo plazo. Se recomienda una actividad física moderada para fortalecer los músculos de la espalda y reducir la tensión en la columna. Además, la fisioterapia elimina gradualmente el dolor.
Además, con la terapia de ejercicios y el deporte, se realizan las siguientes tareas:
- descompresión de las terminaciones nerviosas de la columna vertebral;
- desarrollar un estereotipo de postura correcta;
- dando elasticidad a la columna vertebral;
- mejor circulación sanguínea;
- normalización del metabolismo del disco intervertebral.
El artículo es solo para fines informativos. Recuerde: la automedicación puede ser perjudicial para su salud.